Mejora del hábitat del ciervo volante en Calamocha
-
Visto: 1225
El pasado 10 de marzo se impartió en la feria CAPTUR de Calamocha una conferencia sobre la biodiversidad y su valor.
Fue impartida por dos licenciados en ciencias ambientales que demostraron el valor y el privilegio de vivir en nuestro municipio, Calamocha, en el cual habitan especies tan importantes como el mayor insecto de Europa, y con especies propias, como el chopo cabecero.
La conferencia habló del estudio llevado a cabo desde el Ayuntamiento de Calamocha sobre el ciervo volante (lucanus cervus) y el chopo cabecero (populus migra), una seña de identidad del sur de Aragón, como fuentes de biodiversidad.
El estudio tiene como objetivos incrementar y recuperar hábitats, para lo cual se está llevando a cabo la escamonda de 259 chopos y un estudio detallado de estos, y se van a instalar también en el municipio y los alrededores pirámides de madera muerta para favorecer a la población de ciervo volante.

El chopo cabecero es una especie con un gran valor paisajístico y ecológico que se encuentra en peligro de extinción, debido a que ya no se poda o escamonda, y por ello sus ejemplares, de más de 100 años de edad en muchos casos mueren.

El ciervo volante también es especial, dado que además de ser el mayor insecto de nuestro continente, es un animal casi desconocido, con un ciclo biológico muy raro, porque, pese a que vive hasta 5 años, solo lo hace en forma de insecto durante 15 días y mientras tanto es una larva que se alimenta de madera muerta.
Los investigadores cuentan con la ayuda de un grupo de estudiantes del IES Valle del Jiloca que, desde Junio de 2010, están llevando a cabo un estudio de la población de este insecto en el parque de Calamocha y la ribera del río Jiloca.

La conferencia, que duró una hora, terminó con una reflexión: las especies son fuente de riqueza y es nuestro deber cuidarlas y disfrutar de ellas, como ver los insectos mientras paseamos o admirar viajando las estructuras de los chopos cabeceros.
Pero sobretodo, tenemos que valorar las especies y los espacios naturales, dado que cada vez quedan menos y nosotros tenemos algunos cerca: somos privilegiados por ello.
Marta Blasco (4º E.S.O.)