Ermita de la Virgen del Molino (Santa Eulalia del Campo)
A unos 500 m. de Santa Eulalia del Campo encontramos la Ermita de la Virgen del Molino, que debe su actual advocación al molino que se halla junto a ella. Su primitiva advocación era “la Hermosa”, derivado del antiguo poblado de Villahermosa situado en sus proximidades. El templo tiene tres naves, la central cubierta con bóveda de cañón con lunetos y las laterales con bóveda de arista y cúpula en el presbiterio. Se construyó en 1722 y en 1864 se decoró su interior con pinturas murales que representan a Santiago Matamoros y a San Martín. Posee un camarín decorado con cerámica turolense que sigue modelos valencianos, representando la historia de Judith, fechable hacia 1760. La imagen de la titular es una muy interesante talla gótica del siglo XIV, realizada en piedra arenisca policromada, que ha necesitado una compleja restauración. Del XVII poseía un San Onofre que fue robado. Coetáneo a la ermita es el retablo mayor, mientras que el dedicado a San Juan es algo posterior, de 1782. En 1963 se completó el conjunto de imágenes con un cuadro que representa la muerte de Santa Eulalia, obra de Agustín Alegre.