Iglesia de Santiago (Daroca)

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Fotografía antigua de la derruida iglesia de Santiago
Vista general de la torre

La Iglesia de Santiago de Daroca estuvo situada en la plaza de Santiago, o del Mercado, ocupó la mitad posterior de esta plaza y la casa que hoy hace fondo. Tuvo una torre mudéjar de ladrillo, de planta cuadrada, adornada con labores de ladrillo en forma de zigzag, dientes de sierra, y sobre todo, en el piso superior una ventana ajimezada con decoración de arcos entrecruzados y lobulados, flanqueada por dos paños de sebka, formados por los mismos motivos. Su ornamentación era parecida a la de las ventanas de la torre de Santo Domingo, pero mucho más rica. Esta torre podría ser del siglo XIII. La Torre que fue declarada monumento nacional en 1912 y se derribó al año siguiente.

Probablemente fue una iglesia en piedra sillar, orientada el este, con la torre a los pies, en el lado del evangelio; así puede deducirse de una fotografía antigua en la que se ve un muro de piedra en el lado sur de la torre, con canecillos, posiblemente la única parte que se respetó, junto con la torre, en la reforma de 1678. Pudo ser obra de principios del siglo XIII, con torre del mismo momento. Se desconoce si tenía una o tres naves.

Un inventario de 1581 indica la existencia de los siguientes retablos: Retablo de Santiago, que sería el mayor, el de Santa Cecilia, Sal Gil, San Mateo, la Magdalena y Santa Orosia.

Entre 1678 y 1680 se hizo una profunda renovación de la iglesia, de la que se encargaron los maestros de arquitectura Juan y José Loreyta.

En los documentos conservados en el Archivo de Protocolos de Daroca no se dice si la iglesia estaba en mal estado o simplemente fue debido al ansia de renovación del barroco. Se derribaron los tejados, arcos y estribos, conservando solamente los muros, se construyeron nuevos arcos con pilastras de ladrillo, se hizo la cornisa, se edificó una media naranja con linterna etc. y una portada con piedra de Zaida y ventanas con alabastro de Fuentes de Jiloca.

La obra que suponía mayor dificultad fue sin duda la construcción de un coro dentro del hueco de la torre, ocupando todo el espacio, para lo cual había que hacer unos machones de ladrillo dentro de la nave. Probablemente el pórtico neoclásico de escaso gusto era posterior.

Bibliografía